
Arco de Roda de Bará

Los romanos percibieron que el Arco de medio punto constituía una forma geométrica que portaba la firmeza, reposo y elegancia suficiente, como para asumir y subordinar a una estructura rectangular externa, cargada de helenismo, sin debilitar la fuerza de su expresión. La forma en que logran esta conjunción, constituye la mayor aportación de la arquitectura romana a la composición de la fachada.
El Arco de Tito puede tenerse como el resultado más feliz de este ensayo. En un matrimonio de perfección y maestría, la estructura adintelada y el arco de medio punto que, mecánicamente, pertenecen más al divorcio que a la conjunción, son aceptados y cada uno juegan el papel que le corresponde. Intercambian fuerza y belleza sin que ninguno trate de ocultar al otro.

Arco de Tito
El arco etrusco dispuso una altura equivalente a una vez y media la de su anchura, en tanto que en el arco romano la altura era el doble del diámetro del arco. El Arco de Triunfo, por su belleza, nobleza arquitectónica y por sus proporciones puede tenerse como una concepción maestra de la arquitectura romana, no hay más que pararse delante del Arco de Tito, levantado en Roma hacia el año 80 d.C. para percibir esta apreciación y majestuosidad.
El Arco de Tito fue restaurado, a principio del siglo pasado, por Stern y Valadier. El trabajo de estos dos arquitectos italianos fue tan cuidadoso y respetuoso, que es considerado como ejemplo en todos los tratados modernos de restauración arquitectónica.
Arcos de un vano:
Habitualmente eran colocados en en el acceso principal de las ciudades, para asi recordar a sus habitantes la grandeza y fortaleza del mundo Romano. En su principio fueron arcos de madera donde exponían los trofeos y botines conseguidos en su victoria. Esta costumbre evolucionó hasta crear los arcos conmemorativos con inscripciones. Son de origen Romano y es evidente su éxito, ya que se han construido hasta nuestros días.
Además de este motivo conmemorativo de una victoria o de un gran personaje, también sirvieron como delimitación de fronteras provinciales.
Arcos de tres vanos:
Los arcos de tres vanos, son más comunes en todo el mundo Romano, excepto en España .Mantienen una estructura constante, dos laterales más pequeños y unos centrales más amplios y altos.
En ocasiones sirvieron también como "puertas de control" de las ciudades: por el vano central –más grande- pasaban los carruajes y animales y por los laterales las personas, uno para entrar y otro para salir.
El único arco de este tipo conservado en España es el famoso arco Romano de Medinaceli.

Arco de Medinaceli
Arcos cuadrifontes:
Como su nombre indica, es el que tiene cuatro frentes. De Planta cuadrada o ligeramente rectangular, mantiene en cada uno de sus lados un arco, que como es lógico, se comunica directamente con su enfrentado y perpendicularmente con los otros dos. Es el menos común de los arcos romanos, concretamente en Epaña solo nos queda uno, el Arco de Capera.
Arco de Capera
Manuel Boedo - Gonzalo Castiñeira
Pedo Cancela - Pablo Ezequiel Albariño
(Alumnos de 5º A)